Por Carlos Casanova
Es el anuncio que formula el Presidente Petro al mes de la reapertura de los puentes y recibir la información de que solo han pasado por los puentes en este tiempo sol 67 gandolas, por lo que dedujo ciertamente que las trochas siguen abiertas.
“ Los militares de aquí y de allá” estableciendo responsabilidades directas en los que han permitido ese paso por las trochas, pero voy más allá, se trata de inutilizarlas y no solo poner un militar a impedir el paso, toda vez que se caerá en la discrecionalidad del funcionario de dejarlas pasar por ejemplo en la madrugada.
Lógico es esperar que si así habló el Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas de Colombia, proceda en la sustitución del personal que así lo permitió, pero en Venezuela se debe hacer lo mismo, deben sustituir a los funcionarios y a sus jefes, “de aquí y de allá”
El tema expuesto de los “vivos” binacionales son defraudadores del fisco, no pagan a las naciones y pagan a otros “vivos de aquí y de allá” que cobran por su tránsito, desde que se reabrió el paso por los puentes cualquier mercancía que pase por la trocha es contrabando actividad que debe ser perseguida y castigada. Por ello se habla del regreso a la legalidad del comercio.
Lo revelado por Petro indica que en Venezuela hay dos tipos de comerciantes, los que actúan en la legalidad y los que no lo hacen, estableciendo una discriminación cuando el Seniat controla al comerciante legal al que de ordinario le imponen multas.
Otro elemento indispensable de poner en contexto es el de la credibilidad, un Presidente y sus ministros hablan pero no se cumple, ese engaño social se revela cuando se descubre que el mandato no se cumplió. La realidad el interés económico directo de los funcionarios “de aquí y de allá” no es otra cosa que grupos ya organizados y articulados desde las estructuras de gobiernos como organización binacional actuando desde el gobierno al margen de la ley.
Aquí el tema es otro, ¿cómo desmonto esas estructuras binacionales? Ya que como se sabe no es solo comida lo que pasa por la trocha, es narcotráfico, gasolina, armas, trata de mujeres, niños, reclutamiento forzoso, tráfico de órganos.
La frontera se hizo más porosa de lo que fue y combatir las mafias requiere de patriotismo, de una política de frontera binacional concertada y articulada, que presente resultados, si la frontera sigue siendo el espacio para que lo ilegal avance, se convertirá en una zona donde El Estado Colombiano y el venezolano por su debilidad perderá presencia, favoreciendo nuevas autoridades que en la práctica están montadas.
Sucede como con el caso de la guerrilla, se dejó que actuaran en la frontera y ahí se quedaron y avanzaron territorio adentro de Venezuela, territorio donde se cobran venganza con la muerte por encargo.
Petro da una campanada de lo que puede seguir ocurriendo si no se asumen correctivos en favor del ciudadano.
Dios con nosotros.